domingo, 10 de febrero de 2008

Stanislas Dehaene “Les neurones de la lectura”,


He leído con mi padre este artículo http://www.tendencias21.net/La-capacidad-de-lectura-no-es-innata-y-ha-requerido-un-reciclaje-neuronal_a2065.html y quiere que explique un poco qué dice (luego él me ha corregido el texto).


Hay un señor francés que se llama Stanilas Dehaene, y es profesor de una cosa que se llama "psicología cognitiva experimental" del Collége de France y además es director del laboratorio UNICOG, que se dedica a estudiar las bases cerebrales de las operaciones matemáticas. Este señor ya había escrito un libro muy bueno que se llamaba "La Bosse des Maths" y ahora acaba de escribir otro libro que se llama esta vez “Les neurones de la lectura” y que cuenta como se las apaña el cerebro para leer.



Dice que primero fue el cerebro y luego la lectura, porque si el homo sapiens existe desde hace la tira de tiempo (30.000 años) sólo llemos desde los babilonios (hace 5.400 años) y los alfabetos más antiguos son de hace 3.800 años. Es decir, que leemos desde hace tres dias y nos falta tiempo para acostumbrar nuestro cerebro a la lectura. En su otro libro hbía dicho que la capacidad para las mates es más intuitiva, sale más de dentro que la de las letras.






Para leer el cerebro necesita del ojo, que tiene una cosa que se llama la retina. En la retina hay muchas otras cosas y la más importante para leer es la que se llama fóvea porque su encargo es recibir la información visual. Pero la fóvea es estrecha (mide 0,5 milímetros) y sólo capta un campo visual de 15 grados, es decir que sólo puede reconocer siete letras a la vez (a lo máximo nueve) y nueve letras a la vez. Por eso leemos haciendo movimientos muy rápido del ojo que se llaman "sacadas", que nos permiten hacer una especie de mapa mental del texto. Por eso leer supone ir entendiendo un texto palabra a palabra de manera que la gente más rápida no puede superar las 400 o como mucho 500 palabras por minuto.



El otro protgonista de la lectura es el cerebro. Dehaene ha ido haciendo resonancias magnéticas del cerebro mientras lee y ha visto que el papel más importante lo hace la región del lóbulo occipito-temporal izquierdo, es decir, el trozo que hay hacia la parte de atrás de la cabeza (más o menos detras de la la oreja izquierda). Eso se daba también en presonas que leían en árabe o hebreo (es decir, en idiomas que se leen de derecha a izquierda).






Un capítulo del libro de Dehaene habla de la dislexia y la define como “una dificultad desproporcionada de aprendizaje de la lectura que no puede explicarse ni por un retraso mental, ni por un déficit señorial ni por un entorno social o familiar favorecido”. Según lo que dice ese capítulo una causa de la dislexia puede ser una desorganización anatómica del lóbulo temporal ése y por una alteración de sus conexiones.

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